El uso más común de la marihuana medicinal en el Estados Unidos es para controlar el dolor. Aunque la marihuana no es lo bastante fuerte para el dolor agudo (por ejemplo, el posquirúrgico o el de un hueso roto), es bastante eficaz para el dolor crónico que aqueja a millones de estadounidenses, sobre todo a medida que envejecen. Parte de su atractivo radica en que es claramente más segura que los opiáceos (es imposible sufrir una sobredosis y es mucho menos adictiva) y puede sustituir a los AINE, como Advil o Aleve, si las personas no pueden tomarlos por problemas renales, úlceras o ERGE.
En particular, la marihuana parece aliviar el dolor de la esclerosis múltiple, y el dolor nervioso en general. Se trata de un campo en el que existen pocas opciones, y las que existen, como Neurontin, Lyrica u opiáceos, son muy sedantes. Los pacientes afirman que la marihuana les permite reanudar sus actividades anteriores sin sentirse completamente fuera de sí y desconectados.
En esta línea, se dice que la marihuana es un fantástico relajante muscular, y la gente jura por su capacidad para disminuir los temblores en la enfermedad de Parkinson. También he oído hablar de su uso con bastante éxito para la fibromialgia, la endometriosis, la cistitis intersticial, y la mayoría de las otras condiciones donde la vía común final es el dolor crónico.
La marihuana también se utiliza para controlar las náuseas y la pérdida de peso y puede emplearse para tratar el glaucoma. Un área de investigación muy prometedora es su uso para el TEPT en veteranos que regresan de zonas de combate. Muchos veteranos y sus terapeutas informan de mejoras drásticas y piden más estudios y una relajación de las restricciones gubernamentales a su estudio. También se sabe que la marihuana medicinal ayuda a los pacientes que sufren dolor y síndrome de desgaste asociado al VIH, así como síndrome del intestino irritable y enfermedad de Crohn.
Esto no pretende ser una lista exhaustiva, sino más bien dar una breve visión de los tipos de condiciones para las que la marihuana medicinal puede proporcionar alivio. Al igual que con todos los remedios, las afirmaciones sobre su eficacia deben ser evaluadas críticamente y tratadas con precaución.